Consejos Básicos Para Practicar Mentalmente
- recursosmusic
- 8 jun 2016
- 2 Min. de lectura

Tocar mentalmente no suele ser fácil la primera vez que se intenta. Hay que practicar con regularidad, y los ensayos te permitirán gradualmente obtener mejores resultados.
Los ensayos mentales son más eficaces si:
Tienes experiencia previa en lo que vas a tocar, sea porque conoces la pieza o porque dominas las técnicas necesarias para tocarla.
Ensayas durante las primeras fases del aprendizaje de una pieza, cuando empiezas a formular ideas sobre ello, o durante fases posteriores, cuando ya estás desarrollando estrategias más complejas.
Lo combinas con prácticas físicas.
Las sesiones del Trabajo mental son cortas.
Simultáneamente con los ensayos mentales, imaginas también las respuestas de los músculos que deben ejecutar estos movimientos (como se contraen, qué sensaciones causan, etc.)
Aunque, si estás interesado en estudiar esta actividad en profundidad, deberías buscar información más concretas en manuales específicos sobre la práctica mental, un posible enfoque inicial para un pianista podría ser:
Elige una pieza sencilla.
Analiza la pieza en el pentagrama; asimila su estructura. Familiarízate con todas las partes de la pieza que no parezcan seguir un patrón, estudia la digitación, imagina la ´historia´ que el compositor quería contar con esa pieza. Resulta más fácil aprender algo que tiene sentido para nosotros que algo que no lo tiene.
Mira el pentagrama como si fuera un mapa encima del piano, como si toda línea o espacio en el pentagrama correspondiera a una tecla del piano.
Comienza a imaginar los dedos sobre las teclas relevantes del piano.
Cuando esto te sea fácil, intenta comenzar a mover mentalmente los dedos siguiendo el pentagrama, primero con una mano y luego con la otra.
Si fuera necesario, disminuye la velocidad de ejecución por debajo de lo que exige la partitura, y cuando domines los movimientos, aumenta la velocidad.
Cuando la imagen mental de la interpretación sea suficientemente estable, intenta oír en tu cabeza los sonidos de lo que estás tocando.
Después de practicar estos ejercicios durante diez minutos más o menos (o dos o tres líneas del pentagrama), has un descanso porque puede resultar muy cansado, sobre todo cuando no estás acostumbrado. Intenta ser sistemático y no pases a la sección siguiente hasta que hallas dominado por completo la anterior.
Una vez domines la pieza en tu cabeza, comienza a tocarla en el piano.
Comments